Santísima Trinidad
1) Muchas cosas: El conocer a Dios no pasa solo por lo intelectual, sino también por lo vivencial. Esto me recuerda a Santo Tomás de Aquino quien, una
vez que vio a Jesús, mandó a quemar todos sus libros, porque no eran nada comparado con lo vivido. La vivencia de un encuentro con Cristo hace que tu vida cambie y que estés decidido a cumplir la voluntad de Dios. Solo desde allí se puede explicar mucho de lo que uno vive y enfrenta.
2) La verdad: Sinceramente lo que me hace seguir en este camino de Cristo es la experiencia vivida. Estos días meditaba muchas cosas que me tocó vivir dentro y fuera de la iglesia también, desilusiones, enojo y tristeza. Hasta incluso sentía miedo por si aparecía la calumnia, ya que en estos tiempos todos hablan muy sueltamente de la vida de todos. Pero, cuando lo hablaba con mi confesor, me recordaba que tenía que volver al Dios de la Vida, al por qué elegí esta vida, era recordar mi experiencia de encuentro con Cristo.
3) Glorificar: La gloria de esta vida no pasa por tener fortunas o seguridades materiales, ni mucho menos tener un cargo o una posición. La gloria es saber que con tu vida estás cumpliendo la voluntad de Dios, y hasta me animo a decirte que la gloria es dormir con un corazón lleno de paz y una conciencia tranquila. Algo bueno está por venir.