Por estos días, dialogamos con Alberto Carbonari, un cañadense de 82 años que actualmente reside en Rosario, pero que mantiene

intacto su vínculo afectivo con Cañada de Gómez y con la historia de su familia en la ciudad.

El contacto surgió a partir del reconocimiento que se realizará en el cementerio local a militantes y dirigentes justicialistas fallecidos, un homenaje que despertó en Alberto recuerdos profundos, especialmente porque su padre, Bruno Pedro Carbonari, fue uno de los primeros concejales peronistas de la ciudad, allá por los años ‘40.

“Me hubiera gustado ir, pero ya tengo 82 pirulos y no manejo solo. No tengo quién me lleve”, contó Alberto, lamentando no poder estar presente en la ceremonia. Sin embargo, agradeció la información”.

Una historia familiar ligada a la ciudad

Alberto recordó que su padre trabajaba en la tradicional Casa Cañón, en la esquina de Rivadavia y San Martín, y que su familia vivió varios años en Balcarce 1227. También rememoró la amistad de su padre con figuras políticas de la época y destacó el sueldo del Concejal de aquel entonces..

Habló además de su abuelo y del trabajo comunitario que realizó en la zona rural de Marinsalta, donde junto a familiares y vecinos fundaron la escuela 25 de Mayo, construyendo con sus manos un salón para que los chicos del campo pudieran tener acceso a la educación.

“Estoy orgulloso de mi abuelo y de mi viejo”, afirmó emocionado.

Una vida profesional ligada también a Cañada

Alberto fue odontólogo y durante muchos años viajó desde Rosario para atender pacientes en el Policlínico Moreno. Compartió trabajo con profesionales muy conocidos de la ciudad.

Un mensaje para quienes organizan el homenaje

Antes de despedirse, dejó unas palabras para quienes participarán del acto en el cementerio:

“Mi mensaje es para la gente honrada, que es tan difícil de encontrar hoy. Que sigan trabajando por el bienestar de todos”.

Finalmente, envió un saludo especial a todas y todos los cañadenses, asegurando que siempre lleva a su ciudad en el corazón.